Una receta saludable y muy fácil de hacer con uno de los cereales más nutritivos y con notables propiedades alcalinas.
Para preparaciones dulces o saladas y con los rellenos que tengas a tu alcance o los que te dicte tu imaginación.
Ingredientes
Mijo pelado, una taza
Chia molida, 1 cucharada
Fécula de mandioca, 1 cucharada
Agua, 1 y ½ taza
Aceite de oliva, 1 cucharada
Sal, una pizca
Preparación
Poner el mijo en remojo con agua hasta cubrir durante 8 a 10 horas. En caso de tener que dejar por más tiempo, guardar en heladera hasta su uso.
Pasado el tiempo de remojo descartar el agua y enjuagar
Licuar el mijo con la harina de chía, el aceite, la sal, la fécula de mandioca y el agua hasta conseguir una consistencia cremosa pero no demasiado liquida y el tiempo suficiente para que quede sin grumos
Precalentar una panquequera antiadherente o sartén pincelada con aceite de oliva. Con un cucharon verter sobre la panquequera porciones de la mezcla, ni muy gruesa ni muy fina.
Cocinar a fuego lento hasta que se despeguen los bordes y dar vuelta.
Cocinar a fuego lento de ambos lados hasta dorar levemente y que se despeguen los bordes. Cuidar que no se resequen ni se quemen
Una vez retirados del fuego, aplilarlos en un plato y taparlos con una tapa de cacerola. De esta manera el calor y la humedad mantendrán flexibles los panqueques. Reservar.
Dejar enfriar tapados y luego guardar en heladera cubierto con film.
Se conservan hasta por 4 días. Idealmente usar en el momento ya que a medida que van pasando los días se irán secando un poquito.
NOTA:
Se pueden también hacer opciones dulces y para ello remplazar la sal por algún endulzante o simplemente no saborizar.
Por Chef naturista Mariana Mosler
Docente de IATENA
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